Todo inició en Italia con un viaje en barco hasta Venezuela, en el que Vincenzo Orlando Casagrande buscaba un mejor futuro después de la guerra en Europa.

Llegó a Caracas con muchas ganas de trabajar y conseguir el éxito. Comenzó trabajando en un cargo bajo, en una empresa de reparación de equipos médicos pero rápidamente le interesó el departamento de servicio técnico. Le dijo a su jefe que iba a estudiar para que lo pudieran ascender. Así lo hizo y así lo logró. De esta manera obtuvo toda la experiencia para que, en 1972, fundara una empresa llamada MEDITRON.

Al comienzo MEDITRON era únicamente de servicio técnico pero con empeño y dedicación nuestro fundador logró con total éxito las bases fuertes que hoy en día levantan esta organización.

Hombre de familia, logró renombre de su apellido, de su trabajo y de su carácter fuerte.

Su familia siempre fue su ancla

Italiano de nacimiento, pero de corazón venezolano, mantuvo su familia unida y sus conocimientos han sido pasados a su siguiente generación de manos de su hijo Antonio Orlando Centragolo, ingeniero electricista quien actualmente maneja la compañía que él fundó.

En sus últimos años aún irradiaba carisma y simpatía. Llamado cariñosamente Nonno Vincenzo se mantuvo activo dentro de MEDITRON, colaborando con su experiencia y conocimientos a la gran familia empresarial y personal que dejó.

El legado

Con más de 50 años en el mercado venezolano la empresa MEDITRON se mantiene firme, logrando un posicionamiento importante en el sector de salud, desde ofrecer equipo médico de calidad superior, pasando por servicio técnico especializado, hasta ser los únicos en Venezuela en contar con un laboratorio de radiofarmacia capaz de encapsular Iodo-131.

Todo esto ha sido gracias a nuestro Nonno Vincenzo Orlando, quien, con trabajo duro, esfuerzo y sacrificio fundó lo que somos hoy en día la gran familia MEDITRON.

Honramos y recordamos siempre a nuestro fundador.

Abrir chat
Hola
¿En qué podemos ayudarte?